Ciudad de México, 1946
Desde 2019 es presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM) ypPresidente del Consejo de Administración de Banco Azteca en México y en los países en donde el banco tiene presencia: Guatemala, Honduras, El Salvador, Panamá y Perú. Es vocero oficial del Grupo Salinas. También es Miembro del Consejo del Club de Banqueros de México. Fue Vicepresidente de la ABM (20152017) e integrante de varios de los Comités y Comisiones de dicha asociación.
Cuenta con más de 45 años de experiencia en temas financieros y bancarios. En el año de 2002, fue fundador de Banco Azteca, Vicepresidente del Consejo de Administración y Director General de dicha institución. Ha ocupado el puesto de Director General (CEO) de varias compañías; tales como Confía, Dresdner Bank México, Citibank Panamá, Citibank México, Citibank en Nueva York, Arrendadora Financiera Mexicana y Factoring Corporativo. Fue Presidente del Consejo de Administración de Afore Allianz-Dresdner y Socio del Despacho de Consultoría Booz-Allen & Hamilton en Nueva York y Washington, D.C. También fue Director de Finanzas para el Fondo Nacional de Habitaciones Populares (FONAHAPO).
Luis Niño de Rivera tiene una Licenciatura en Administración de Empresas de la Universidad de Indiana y una Maestría en Negocios Internacionales y Política Exterior por la Universidad de Nueva York, EUA.
Su afición por el deporte, lo llevó a participar como clavadista olímpico en Tokio (1964) y en México (1968).
En 1964 formó parte de la delegación mexicana en las Olimpiadas de Tokio. Ahí quedó en cuarto lugar de clavados, y agradeció que no fueran en México, porque contrario a lo que se piensa del apoyo local, señala que existe una mayor presión y obligación por no defraudar a nadie.
A su regreso a México, dijo que ya tenía la idea de incursionar en la torería, pues tenía amigos que se dedicaban a eso, por lo que comenzó a entrenar al mismo tiempo que entró a trabajar en el área de mercadotecnia de una empresa.
“A las 6:00 de la mañana iba a Chapultepec a entrenar o a la Plaza México, y llegaba a las 9:00 a trabajar, hasta que al año de estar en la empresa, dije: no consigo estar en los dos lados”.
Tras tomar la valentía de renunciar en su puesto de mercadotecnia comenzó a torear en pueblos hasta que pudo presentarse en la Plaza México, donde dijo, tuvo la fortuna de que el novillo saliera embistiendo, logrando cortarle una oreja a la primera.
“Eso me abrió las puertas para torear dos años, dos temporadas, 13 tardes en la plaza México y otras 17 tardes en otras plazas; Guadalajara, Durango, Aguascalientes, Monterrey. Y fue suficiente para darme cuenta, si podía yo ser profesional del toreo, si estaba dispuesto a pagar el precio que hay que pagar, que es muy elevado por ser torero profesional. Y dije no, así no se puede. Y lo dejé”.
Desde 2013 es conductor del programa taurino “México Bravo” de ADN 40.
Tras tomar la valentía de renunciar en su puesto de mercadotecnia comenzó a torear en pueblos hasta que pudo presentarse en la Plaza México.