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Plaza de Toros de Las Ventas

viernes , 28 de septiembre de 2018

Corrida de toros

FICHA TÉCNICA DEL FESTEJO

Ganadería: Toros de Toros de Victoriano del Río y Toros de Cortés (1º y 4º) - 5º bis Conde de Mayalde - desiguales de presentación y juego. Manejables, encastados 1º, 2º y 6º deslucidos y descastados 3º al 5º - (manejable pero falta de fuerzas el primero, encastado el segundo, deslucido el tercero, inválido el cuarto, parado el quinto y complicado a la defensiva el sexto)

Diestros:

Alejandro Talavante: de gris plomo y oro. Ovación con saludos y silencio.

Jimenez Fortes: de tabaco y oro. Silencio tras aviso y herido.

Pablo Aguado: en sustitución de Paco Ureña que confirmará la alternativa de barquillo y oro. Ovación con saludos y oreja.

Incidencias: Parte médico de Jimenez Fortes: “contusiones y erosiones múltiples pendiente de estudio radiológico. Se traslada al Hospital San Francisco de Asís con cargo a la Fraternidad”. Fdo. Dr. García Leirado.

Entrada: 20.884 espectadores

Imágenes: https://t.co/XIetZD5hC7

Video: https://twitter.com/i/status/1045752087315976192

Crónicas de la prensa

Portal Taurino

Por Alberto Bautista.Oreja al aroma de Pablo Aguado y la terrorífica cogida a Fortes

El sevillano realizó lo más destacado de la tarde, en dos faenas de poso y distinción en la tarde de su confirmación. Fortes herido leve, tras estar a merced del sobrero de Mayalde en una aterradora cogida.

Con reminiscencias ordeñistas, Pablo Aguado entró de lleno en Madrid. Lo hizo en la primera de abono de Otoño tras cuajar dos faenas pintureras plenas de raza, sabor y disposición en la tarde de su confirmación. El poso y la distinción se hizo patente en dos faenas de corte artista plenas de recursos. Combinó la técnica con el oficio, el aroma con el buen bajío, salvando así una tarde de expectación donde faltaron toros. Fortes rozó la tragedia y la expectación por Talavante quedó colmada en el desván de los deseos, con un inválido en cuarto lugar que debió de tomar el camino del desolladero.

Pablo Aguado, cortó una oreja del sexto tras una faena con multitud de recursos donde combinó la técnica con la quietud. Trazó naturales imposibles, derechazos de todos los colores y descerrajó con una estocada una grata actuación jaleada por los tendidos. Confirmó con “Bolero” un estimable toro de Cortés al que toreó encajado a la verónica, firmando otra labor de técnica y plasticidad. La estocada baja dejó sin premio una seria labor. El sevillano entro de llenó en Madrid y compró el billete para San Isidro 2019.

Alejandro Talavante se fue de vacío tras la única faena de entidad que pudo realizar. Sucedió en el segundo, otro toro de Victoriano del Río sin remate, pero que resultó ser encastado y con clase donde el extremeño se adornó en una labor donde hubo tandas encajadas y otras más deslucidas. Hubo división y el público tomó partido por el toro. Pinchó y saludó una ovación desde el tercio. El inválido que hizo cuarto con el hierro de Toros de Cortés le imposibilitó cualquier atisbo de triunfo. No hubo opciones y lo muleteó sin mucha historia. Le queda una tarde más en la feria de Otoño, con la corrida de Adolfo Martín.

Fortes se salvó de una cogida terrorífica que se puedo tornar en drama, a juzgar por cómo el sobrero del Conde de Mayalde le volteó al entrar a matar, hasta en tres ocasiones. Se mascó la tragedia. La plaza enmudeció, pero el parte médico de manera milagrosa apuntó a erosiones y contusiones múltiples. Otra vez volvió a nacer. Su tarde fue directamente para olvidar. Con el tercero le faltó componer la figura y templar la embestida del Victoriano, enfrascándose en multitud de pases sin apuntar nada, ídem con el quinto bis. En la suerte suprema se jugó el tipo sin aspavientos. Y el destino le retornó a la vida…

ABC

Por Andrés Amorós. Horrible cogida a Fortes y oreja a Pablo Aguado, pura escuela sevillana

Con la Plaza casi llena, comienza esta Feria de Otoño: pasará a la historia como la primera (¿la única?) en la que se han sorteado los toros y las combinaciones. Los toros de Victoriano del Río no dan el juego esperado; Fortes sufre una impresionante cogida; Aguado corta una merecida oreja.

Lamentando la ausencia del herido Ureña, aplaudo que lo sustituya Pablo Aguado, que confirma su alternativa. Recuerdo su faena, una de las mejores de la Feria de Abril. Desde entonces, apenas ha toreado, sólo cinco festejos. ¿Por qué? Me lo preguntan unos amigos sevillanos y no sé darles respuesta: es un ejemplo claro de injusticia. Con tan escasa experiencia, ¿estará preparado? Se juega mucho, esta tarde. Recibe, meciendo con garbo el capote, al primero, que flaquea; los remates a una mano, pura escuela sevillana, encantan también en Madrid. A las gaoneras «al tragantón» de Talavante, replica –y mejora– con primorosos delantales. El toro tiene movilidad pero las fuerzas justas y, por eso, se cierne, con peligro. Muletea con naturalidad y torería pero el toro se para y el éxito se frustra.

Talavante es la única primera figura que se ha apuntado a esta Feria. (Cada uno con su estilo, han manifestado su rechazo El Juli y Morante; este último, le dijo a Lorena Muñoz una de sus frases enigmáticas: «¿Apuntarme al sorteo? Depende del pito y la pelota…»). Tiene mérito Talavante, sin duda, pero también lo necesitaba porque ha toreado muy poco, para su categoría, sea por su cambio de apoderado o por poner condiciones excesivas. Apuntarse a estas dos tardes, en Las Ventas, es una fuerte apuesta. Protestan el segundo, también flojo, de extraño nombre («Jaceno» es un salsa picante de Jamaica). Bien, Trujillo, en banderillas, como siempre. Sin probaturas, Talavante hace el «cartucho de pescao», liga con facilidad naturales (su mejor arma). Algunos muletazos son buenos pero no todos. La faena es desigual, surge cierta división. Sube, al final, por quedarse muy quieto. Mete la espada con facilidad, algo desprendida, pero a la segunda.

Veo a Fortes, este año, más seguro, sin perder su impávido valor. Al tercero, que se pega una costalada, lo brinda con un largo discurso, al micrófono. (¿Por qué no se conecta esto a los altavoces de la Plaza? ¿No tienen derecho los espectadores a enterarse de lo que dice, tanto como los de la tele?). Plantado en el centro, lo engancha, corre bien la mano, mientras el toro repite, pero pronto se apaga y la verticalidad no emociona. Mata de un feo sablazo.

El cuarto es un «Ebanista» bizco, recibido con pitos y su comportamiento no mejora la acogida. Estalla la tormenta porque el presidente no lo cambia. La tarde no remonta: crece la cólera, las esperanzas menguan, diría Cervantes. Cuando el toro se cae, el personal se desentiende de los muletazos y se consuela increpando al presidente. (¡Si pudieran hacer lo mismo con los políticos que yo me sé!). Talavante desiste y, como no ha hecho faena, mata sin estrecharse.

El quinto se derrumba: tarda el presidente demasiado en cambiarlo. Mourinho diría, con su simpático acento portugués: «¿Por qué, por qué?». El sobrero, de Mayalde, es más toro. La voluntad de Fortes se estrella contra la sosería de la res. Al entrar a matar por tercera vez, sufre un tremendo volteretón, lo llevan a la enfermería: felizmente, no sufre cornada pero sí una lesión, pendiente de estudio.

El sexto, mucho más serio que sus hermanos (fue sobrero en Pamplona), renquea de los cuartos traseros y derrota, violento. Sin amilanarse, Aguado vuelve a lucir su estilo clásico en muletazos de buen trazo. Al final, buscándole las vueltas, improvisando, logra pases suaves. Acaba toreando de frente, puro estilo sevillano (lo afea con la tontería de mirar al tendido) y mata bien: justa oreja. Ha dejado una excelente impresión y las ganas de volver a verlo.

Postdata. Aplaudo la noticia de la concesión del premio Ciudad de Sevilla a Miura. Como decía el maestro Antonio Burgos, si todas las tradiciones valiosas españolas se hubieran conservado como la de los miuras, mejor nos iría…

Madrid Temporada 2018.

madrid_280918.txt · Última modificación: 2020/03/26 12:09 (editor externo)